El Salmo 23 es uno de los salmos que primero identifiqué. En el catecismo lo ilustraban con tiernos borreguitos en brazos de un Jesús europeo con ojos claros. Y esa fue la imagen que se quedó grabada en mi mente de pequeña.
Había otro versículo que no terminaba de entender, que yo recordaba como: “ Aunque pase por cañadas oscuras, nada he de temer.”
La sensación que esta frase me evocaba era como si Jesús fuera un superhéroe que llegaría a rescatar a la ovejita entrando en la oscuridad.
Y tú, ¿recuerdas qué surge en ti cuando escuchas esta parte del Salmo 23?
Para empezar, ni sabía lo que era una cañada… jajaja…. Fue hasta que empecé a escuchar diferentes traducciones que escuché “valles”, en vez de “cañadas”. Y ahí si pude entender un poquitito mejor.
Pero aunque entendiera el espacio en el que el borreguito se encontrara, eso no cambiaba mi expectativa infantil de que Jesús llegara a rescatarla.
En tu caso, ¿tienes alguna expectativa en tu oración de lo que Dios ha de hacer en la cañada o valle oscuro?
No ha sido sino hasta hace algunos años , que tuve la experiencia de ser internada y operada de emergencia que este Salmo tomó otra connotación para mi. Tomó vida.
Y para mi sorpresa, no llegó Dios a rescatarme, sino que llegó a acompañarme.
No me sacó del Valle oscuro, sino que me acompañó en el valle oscuro.
Por más que quería casi salir volando del hospital, no sucedió.
Y tú, ¿has notado si es que tienes expectativas De Dios cuando estás en valles oscuros?
¿Esperas que te rescate?
¿Permites que te acompañe?
Es humano querer evadir el sufrimiento. Y también el sufrimiento, el pasar por valles oscuros, es parte de la experiencia humana.
A ti, ¿cómo te gustaría atravesar esos valles?
Si el Espíritu te inspira, comparte con Jesús carpintero lo que descubres que es tu expectativa al estar en valles oscuros. Y tal vez, descubras una nueva manera en cómo Dios quiere estar contigo.
Marisol
P.D. Podemos escuchar acerca de estar con Dios en el sufrimiento y en su amor en las lecturas de la conmemoración de los fieles difuntos, año / ciclo C.

